Cuando solicitas una consulta de telepatía, estás dándole a tu animal

la oportunidad de ser escuchado.

 

Se tratan de seres de otra especie pero con la misma capacidad

de pensamiento, sentimiento, opinión y decisión que nosotros.

 

Por tanto, la consulta se convierte en una herramienta terapéutica

para mejorar la relación humano-animal.

​

​

​

​

 

En la consulta transmito al animal tus preguntas y después te hago llegar sus respuestas.

Éstas pueden aparecer en forma de frases, sentimientos, imágenes, sensaciones corporales… no haré una interpretación de lo que el animal quiere decir, simplemente trasmitiré tal y como nos llega aquello que ellos nos comunican, ya que al intentar interpretar se corre el riesgo de hacerlo mal y de poner palabras humanas que ellos no quieren decir.

 

                                                                           

La comunicación telepática se hará siempre buscando el

bien de los animales y nunca el exclusivamente humano.

 

Se trata de mejorar la relación entre ambos, mediando y

llegando a acuerdos si fuera necesario, pero nunca

intentando imponer la voluntad de uno sobre otro.

 

El animal se encuentra en su pleno derecho de querer

o no querer comunicar, por tanto, si no desea hablar,

no podremos ni debemos obligarle y la consulta

no podrá realizarse. Esto puede ocurrir en mínimas

y raras ocasiones, pero no es imposible.

En tal caso podremos esperar a otro momento

a ver si lo encontramos más receptivo.

​

​

​

Tras la consulta, y sólo si fuese necesario, puedo ofreceros ayuda terapéutica para terminar de asentar el proceso sanador de la comunicación.

 

Trabajo con estas terapias naturales para animales, que podrán ayudarlos a mejorar más rápicamente.

 

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

​

Para poder comunicar con tu amigo necesitaré una foto de él, reciente a ser posible. Me la enviarás por e-mail junto a otros datos que te explico más adelante, y concertaremos una cita telefónica en la que pueda aclarar todas tus dudas, por lo que te recomiendo que las hayas escrito previamente para así poder agilizar la consulta y asegurarte de que no te hayas dejado ninguna pregunta en el tintero.

 

Buscaremos el momento idóneo en el que la comunicación pueda hacerse tranquilamente y sin prisas.

 

Si se tratase de una urgencia haría hueco para vosotros en la agenda.

No atenderé llamadas que previamente no hayan sido citadas, a no ser que se trate de una urgencia.

 

Consideramos consultas de urgencia aquellas que no pueden esperar, como puede ser el caso de un animal a punto de fallecer y que necesite despedirse o un animal extraviado.